Cómo oxigenar el vino.

Oxigenar un vino, es dejarlo un tiempo en contacto con el aire. Este es motivo por el que a veces saben mejor las últimas copas de una botella; el oxígeno hace que se suavice su sabor y aparezcan mejor sus aromas.

La forma más sencilla de hacerlo es servirlo en la copa muy lentamente. Si decides hacerlo así debes abrir la botella un tiempo antes de servir.

 Es posible, si te gusta el vino, o si eres un simple aficionado que tengas un decantador en casa.  Puede suceder incluso que lo tengas como un regalo y no sepas para qué se utiliza

A las personas que les gusta disfrutar de un buen vino tinto con todas sus cualidades  se les recomienda la utilización de un decantador.  Al exponer el producto en contacto con el oxígeno mejora en gran medida su sabor y deja que los aromas y sabores salgan a la luz.

El decantador de vino es una vasija de cristal cuya base es más ancha que la boca. Con este utensilio, además de airear un buen vino, eliminarás los posibles posos que contenga el vino por llevar mucho tiempo embotellado. Pero no olvides hacerlo sólo si sabes utilizarlo. Una forma inadecuada sólo para dar vistosidad podría hacer perder al producto las notas delicadas de la crianza

Una decantación  ha de hacerse de forma lenta y cuidadosa y después una agitación suave.

 Se puede decantar cualquier tipo de vino, aunque haya quien opine que sólo se debe hacer con el tinto. Sólo que al hacerlo con un caldo más antiguo debemos tener en cuenta que ha tenido más tiempo para ganar fuerza por sí solo y podemos estropearlo si lo  aireamos en exceso.

 

Decantar un vino más antiguo (con sedimentos) requiere un poco más de finura. Para empezar, el vino ha tenido tiempo de sobra para ganar edad, por lo que no necesita ningún impulso artificial. Podrías incluso arruinarlo con la sobreexposición al oxígeno. Por lo tanto, no se debe decantar un vino antiguo inmediatamente antes de servirlo.

Decantar un vino joven (sin sedimentos) es fácil: sólo hay que vertirlo en el decantador y dejarlo reposar durante unos 20 minutos antes de servirlo. Como resultado es probable que se observe un incremento dramático en la sutileza y complejidad.

Antes de decantar, hay que oler y catar el vino. Esto nos dará una idea de usar o no decantador así como el tiempo de oxigenación. Posteriormente, iremos vertiendo el vino con suavidad procurando que se deslice por las paredes del recipiente.

Durante el proceso, observaremos si aparecen algunos posos o si se advierte algún cambio de color. Más tarde lo dejaremos reposar.

La permanencia en el decantador antes de tomarlo debe ser corta y en el último momento antes de pasarlo a la mesa. Una vez oxigenado, no va a haber ninguna otra mejoría, y lo mejor es beberlo.

Por último, hay otra manera de airear el vino, se trata de “jarrear”, hacerlo con una jarra de cristal. La técnica es parecida al decantador, pero mucho más tosca y menos vistosa.

Tienda Oficial:

Dirección

Avd. de Jaén, 190
23130 Campillo de Arenas (Jaén)

Contacto

Movil: 660 904 777
Email: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

© 2024 El Clavel de Lola